¿Qué tipo de comunidad necesita tu organización?

Los profesionales del SXXI tienen un nuevo territorio desconocido que deberán conquistar y apropiarse: las comunidades. Estas serán la nueva forma organizativa que más protagonismo tendrá en los próximos años. La nuevas fronteras de la gestión empresarial pasan por entender los tipos de Comunidad y su funcionamiento: las claves de éxito de la interacción entre personas e ideas.

En función de la funcionalidad que tenga una comunidad las podemos clasificar y determinar su utilidad para nuestra organización, así como los procesos y  tecnologías más frecuentes para cada tipo de comunidad.

Las redes sociales internas serán la herramienta gestión del conocimiento, de comunicación de gestión del cambio y de innovación Pero ¿Tú para que las quieres utilizar? 

Los tres tipos de  innovación 

La innovación es el camino que debe recorrer una idea desde que nace como idea hasta que se convierte en realidad. Para muchos los procesos de innovación son procesos disruptivos, algunos aceptan la mejora como un proceso de innovación a la que denomina la innovación continua. Pero existe otros procesos organizativos donde las ideas  se desarrollan de forma imperceptible y poco estructurada pero que tiene enorme valor de negocio, la innovación difusa. 

Los procesos de mejora o innovación disruptiva pueden tener unos protocolos (stream o workflows) muy establecidos, en forma de proyecto o con otro tipo de procedimientos que exigen reuniones, priorización o presupuestación. Pero la innovación difusa es un proceso  completamente desestructurado que lo único que pretende es la comunicación o el aprendizaje, el intercambio de ideas  que fomenta la creatividad mediante la “exaptación” en redes líquidas.

Estos entornos de conversaciones son entornos  creativos y se desarrollan las ideas. Según el principio de “exaptación” (concepto que recoge de la biología y populariza Steven Johnson) nos dice que las ideas evolucionan y se convierten en nuevas ideas reaprovechables, pero de forma poco estructurada, de forma seréndipica, impredecible. Es decir la conexión de ideas por si misma  crea mejora, crea innovación, permite mejores prácticas sin necesidad de estar estructurada. Es la innovación difusa.

Desde esta perspectiva distinguimos tres tipos de propósitos u objetivos:

1. Gestionar el conocimiento o innovación difusa: El objetivo primario es poner a disposición de la organización conocimiento de forma social. Puede ir desde una funcionalidad más comunicativa más conversacional a una funcionalidad más estructurada donde haya comunidades de práctica que sistematizan este conocimiento con procedimientos más o menos sistematizados, donde el objetivo sea el aprendizaje o la obtención de referencias “buenas prácticas”.
2. Gestionar la mejora o la innovación continua: Este tipo de comunidades pretenden mejorar procesos o prácticas. Pueden ir desde comunidades donde sólo se obtienen ideas, más o menos priorizadas para la mejora hasta la puesta en marcha de estas ideas en comunidades con procedimientos más estructurados. Las ideas que se piden o las mejoras tienen un carácter temporal, limitado en el espacio organizativo.
3. Gestionar el Cambio o innovación disruptiva: Este tipo de comunidades se crea para la optimización de cambios disruptivos, con elevada resistencia o complejidad (innovación disruptiva). Hay una búsqueda que las conversaciones creen implicación mediante la aportación de ideas o comunidades con procedimientos estructurados que buscan la innovación.

Tipologías de Comunidades

Con independencia del objetivo de la comunidad que puede ser más difuso o cultural, a otros más basados en la mejora o en la gestión del cambio estas comunidades pueden tener su flujo de información más o menos estructurad. En función de esto podríamos distinguir entornos poco estructurados donde las conversaciones no obedecen a procedimientos a comunidades que tienen procedimientos formalizados.

Si unimos el objetivo y el tipo de estructuración tendríamos seis tipos de comunidades:

1. Comunidades Comunicación: Compartir información relevante sobre un aspecto o dominio mediante un intercambio de ideas que produce creatividad mediante la “exaptación” en redes líquidas. La creatividad ocurre como un proceso no buscado que se produce por la conexión de ideas por sí mismas  y la  hibridación produce mejoras en estas ideas, un entorno favorecedor de una cultura innovadora.
2. Comunidad de Aprendizaje Informal: Construir nuevo conocimiento o desarrollar nuevas ideas que puedan servir a otras personas de  la comunidad para aplicarlas,  sistematizar conocimiento. La innovación se al igual que en la anterior comunidad se produce en el ámbito personal pero transciende al ámbito organizativo de una forma no determinada o difusa.
3. Comunidades de Creatividad: Compartir para obtener una mejora organizativa, un objetivo organizativo (de mejora), por lo que el foco de su participación y la evaluación que hacen de su participación está enfocado a este objetivo: generar ideas de mejora. Ayuda a la  innovación continua y a pesar de la baja estructuración de la comunidad suele haber feedback sobre el impacto de la comunidad en el objetivo.
4. Comunidades de Mejora: Guiar la actuación organizativa en mejores prácticas que intentan mejorar aspectos organizativos. Las tareas y procedimientos de esta comunidad pueden ser  tanto en el diseño como en el seguimiento de mejora o innovación continua.
5. Integración Cambio Cultural: Asegurar la involucración y compromiso en las diferentes fases de los proyectos de cambio disruptivos, es decir, a la creación de necesidad, construcción, puesta en marcha, implantación y seguimiento de un proyecto de innovación disruptivo. Disminuir las resistencias organizativas, generar información y de la evolución del proyecto de cambio.
6. Comunidades de Innovación: Crear entornos de trabajo virtual de los agentes de cambio en las diferentes fases de los proyectos de cambio disruptivos con procedimientos internos complejos que están comprendidos dentro de un proyecto de cambio.

Las nuevas organizaciones tendrán que asumir el cambio de paradigmas y valores que supone funcionar con estas nuevas formas organizativas donde TODOS somos protagonistas de la innovación. Pero, también deberemos aprender a sistematizar este tipo de comunidades. Espero que esta clasificación que utilizamos en Humannova en nuestro trabajo cotidiano te pueda servir.

Virginio Gallardo